Infiltraciones

¿Qué son las infiltraciones y para qué sirven?

Las infiltraciones son un procedimiento médico utilizado para aliviar el dolor y la inflamación en diversas partes del cuerpo. Consisten en la aplicación de medicamentos directamente en la zona afectada, lo que permite un alivio más rápido y localizado de los síntomas. Este tratamiento lo realiza un médico especializado, como un reumatólogo, utilizando técnicas seguras, muchas veces guiadas por ecografía, para asegurarse de que el medicamento llegue exactamente al lugar necesario.

¿Qué productos se utilizan en las infiltraciones?

Los medicamentos más comunes que se emplean en las infiltraciones son:

  • Corticoides: Son potentes antiinflamatorios que reducen la inflamación y el dolor de manera eficaz. Son especialmente útiles en enfermedades como la artritis o la tendinitis. Sin embargo, su uso tiene ciertas limitaciones:
    • Frecuencia: No se recomienda hacer infiltraciones repetidas con corticoides en la misma articulación más de tres o cuatro veces al año, ya que podrían afectar a los tejidos articulares si se usan en exceso.
    • Precauciones: En personas con diabetes, los corticoides pueden aumentar los niveles de azúcar en sangre (glucemia), por lo que es importante controlarla después del procedimiento.
  • Anestésicos locales: Se utilizan para aliviar el dolor de forma inmediata durante o después de la infiltración. Funcionan como un “analgésico local” y
    también ayudan a confirmar el diagnóstico si el alivio es significativo.
  • Ácido hialurónico: Este compuesto, que forma parte natural del líquido articular, se emplea principalmente para tratar la artrosis. El ácido hialurónico
    utilizado en infiltraciones articulares es diferente del que se usa en procedimientos estéticos. Mientras que el de estética está diseñado para rellenar y dar volumen en la piel, el ácido hialurónico articular tiene propiedades lubricantes y amortiguadoras, ayudando a mejorar la movilidad y reducir el dolor en la articulación afectada.

¿Qué partes del cuerpo se pueden infiltrar?

Las infiltraciones pueden realizarse en diferentes estructuras del cuerpo, dependiendo de la localización del dolor o la enfermedad:

  • Zona axial (columna vertebral):
    • Articulaciones de la columna, como las facetas articulares.
    • Espacios entre las vértebras, como en el caso de infiltraciones epidurales para tratar dolor lumbar o ciática.
    • Inserciones de tendones en la región lumbar o cervical.
  • Zona periférica:
    • Articulaciones como rodillas, hombros, codos, muñecas, caderas, y pequeños dedos de las manos o pies.
    • Tendones inflamados o estructuras alrededor de ellos, como en casos de tendinitis o bursitis.
    • Bolsas articulares (bursas) inflamadas, como la bursa del hombro o la cadera.

¿Son dolorosas las infiltraciones?

El procedimiento puede generar cierta molestia, pero generalmente es bien tolerado. En algunos casos, se utiliza anestesia local para minimizar cualquier incomodidad durante la infiltración.

¿Cuándo están indicadas las infiltraciones?

Este tratamiento se emplea en diversas enfermedades reumatológicas y ortopédicas, como la artrosis, tendinitis, bursitis, o ciertas formas de dolor lumbar. El médico siempre valorará si este tratamiento es adecuado según las necesidades de cada paciente.

¿Qué precauciones se deben tener?

Además de las limitaciones en la cantidad de infiltraciones con corticoides y el control de la glucemia en personas con diabetes, es importante:

  • Comunicar al médico cualquier alergia o problema de salud previo.
  • Seguir las indicaciones postinfiltración, como evitar esfuerzos intensos en la zona tratada durante las primeras 24-48 horas.